Extracciones de cannabis con alcohol
Las extracciones de cannabis con alcohol son las más populares cuando se quiere realizar una extracción en casa debido a los sencillos materiales necesarios para ello. Principalmente, se emplean dos técnicas que únicamente difieren en el tipo de solvente empleado.
Por un lado, si la extracción de cannabis se realiza con etanol, el método es conocida como QWET (Quick wash ethanol o lavado rápido en etano); si se realiza con isopropílico, QWISO (Quick wash isopropyl o lavado rápido en isopropílico). El proceso de extracción no ocasiona grandes cambios si se emplea uno u otro, pero sí se han de tener en cuenta las características de cada tipo de alcohol por los resultados que ofrece.
Diferencias entre etanol e isopropanol
Tanto el etanol como el alcohol isopropílico son aptos para extraer resina de las flores de cannabis, no obstante, ambas sustancias no aportan el mismo grado de pureza a la mezcla resultante.
El isopropanol, aunque se utiliza mucho en USA, es mucho más tóxico que el etanol, y más potente como disolvente. Ésto conlleva una extracción mayor de sustancias no deseadas como la clorofila, que otorga un sabor amargo al aceite de marihuana. Aun así, el etanol también separa parte de la clorofila de la materia vegetal, aunque se pueden tomar medidas para reducir la cantidad.
El etanol es un solvente polar, por lo que tiende a disolver las sustancias solubles en agua. Para minimizar este efecto es conveniente congelar tanto el alcohol como las flores a utilizar ya que a más baja es la temperatura, más costoso es extraer esta sustancia. Si al contrario, calentamos el alcohol en un intento de extraer más terpenos y cannabinoides, la cantidad de clorofila será tan alta que dará un sabor espantoso a la extracción y destruirá las cualidades organolépticas originales del material.
Cómo realizar extracciones de cannabis con alcohol
Una vez decidido el alcohol que se va a emplear para realizar la extracción de cannabis, habrá que cerciorarse de contar con todos los instrumentos necesarios para ejecutarla correctamente.
Materiales necesarios para la extracción con alcohol
- • Cogollos cargados de resina y de calidad
- • Alcohol etanol o isopropanol
- • Malla de secado de 25 micras o filtros de café
- • Colador de alambre
- • Frascos de vidrio con cierre hermético
- • Superficie antiadherente (como una bandeja de Pyrex)
- • Horno
- • Olla
Elaboración
Para este método de extracción de cannabis es necesario que el material utilizado esté completamente seco para que el alcohol separe únicamente los cannabinoides y terpenos precisos. Para ello, se deben desmenuzar los cogollos en forma de canica y eliminar todos los tallos, que darán un mal sabor al aceite resultante.
A continuación, basta con introducirlos en el horno esparcidos sobre papel vegetal durante 20 minutos a 90ºC. De esta forma, a parte conseguir un secado íntegro, se descarboxila activando los elementos psicoactivos de la marihuana.
Antes de proceder a juntar al alcohol con las flores, este tipo de extracción de cannabis dará mejores resultados congelando a unos -17ºC tanto los cogollos como el etanol o isopropanol. En el mismo bote de cristal en el que se ha congelado la marihuana, se ha de introducir el alcohol hasta cubrir unos 2 centímetros por encima.
En este momento, si se ha optado por hacer uso de etanol, el siguiente paso será introducir el recipiente en el congelador 3-4 minutos tras remover la mezcla suavemente. En el transcurso de este tiempo también es necesario remover el contenido un par de veces. Esto será suficiente para pasar la mezcla por el colador de alambre para separar el alcohol de la resina. Se puede perfeccionar la mezcla con un segundo filtrado utilizando una malla de micraje menor.
En el caso de utilizar isopropílico para la extracción de cannabis sólo se removerá el recipiente durante unos segundos, no más de 30, para pasar a colar de la misma manera. Con el material vegetal sobrante se puede volver a realizar una extracción, aunque la calidad de la misma será mucho inferior que la primera.
Otro método de extracción con alcohol
La experiencia realizando extracciones de cannabis es lo más útil para conseguir una calidad óptima de aceite de marihuana. Ésta es la razón por la que se encuentran tantas variedades a la hora de aplicar las técnicas de extracción. En este caso no es distinto.
Muchos autocultivadores deciden separar sus cogollos en varios recipientes de cristal para aplicar una cantidad menor de alcohol y aumentar, así, el sabor de sus extracciones. La diferencia más significativa a la hora de llevarla a la práctica es que antes de colar la mezcla se ha de pasar de un bote a otro, aumentando el alcohol aplicado a cada manojo de flores.
Colado el material tras llevar a cabo el tipo de extracción de cannabis escogido, habrá que purgar la mezcla para eliminar cualquier resto de alcohol y sustancias nocivas que haya quedado.
Purgado en las extracciones de cannabis con alcohol
Purgar el resultado de la extracción de cannabis es lo mismo que decir evaporar el alcohol que ha quedado adherido a la mezcla resultante. El objetivo del purgado es conseguir un aceite lo más puro posible y con las máximas propiedades del producto (en este caso del THC).
El alcohol se evapora en contacto con el aire. En el caso de disponer de tiempo se puede dejar evaporar tranquilamente durante un día para asegurar una completa desaparición de dicho alcohol. Una forma más rápida es mediante un baño maría. Basta con colocar una bandeja de Pyrex en una olla con unos centímetros de agua en el fondo y dejar evaporar.
En el caso de contar con un equipo de purgado para este tipo de extracciones de cannabis más profesionales, se colocará en una superficie antiadherente la mezcla tras un previo baño maría, y se insertará en la campana u horno de vacío. Cuando la resina se hinche, la bomba se debe apagar. Este proceso se repite hasta que el aceite deje de coger volumen.
Precauciones durante el purgado
Al purgar una sustancia, se está esparciendo por el aire el disolvente que ésta contiene. En este caso se trata de alcohol, aunque no es tan combustible como la mayoría de los gases para extracción de resina, sigue siendo inflamable y es peligroso acercar durante el proceso cualquier fuente de calor. Por esto, siempre se debe permanecer en un lugar bien aireado al realizar el purgado de cualquier tipo de extracción de cannabis.
Conservación del aceite
Toda extracción de cannabis necesita un buen almacenamiento para alargar su vida útil. En general las mejores condiciones para una correcta conservación del aceite es un lugar oscuro, donde no reciba luz directa del sol, ni haya una temperatura elevada o con excesiva humedad.
La nevera es un buen lugar donde guardas las extracciones de marihuana. Un recipiente de cristal oscuro es de gran ayuda a la hora de evitar el impacto de la luz en el momento del desplazamiento del aceite, o en el caso de permanecer en cajón que se abra constantemente. Aunque éste es el caso que se ha de evitar siempre que sea posible.