Kifi. Qué es y cómo se extrae

Los métodos de extracción de cannabis disponibles actualmente son muchos y muy diversos. Uno de los primeros en aparecer fue el usado para el Kifi, una técnica que necesita un tamiz para separar las glándulas de resina de la planta de cannabis. Aunque se trata de un concentrado muy popular, no todo el mundo lo conoce con este nombre.

¿Qué significa Kifi?

El Kifi es una sustancia derivada de los cogollos de la planta de marihuana. Es una acumulación de tricomas, las glándulas resinosas que se encuentran en las flores de estos vegetales y que le dan el aspecto de nevadas. Los tricomas contienen los terpenos y cannabinoides, que aportan al cannabis su perfil organoléptico y su efecto, respectivamente. Por ende, son los responsables tanto de los efectos psicoactivos, como de los efectos medicinales de estas plantas.

Kifi proviene de la palabra magrebí “kif”, que hace referencia al cannabis en general. Este término ha llegado a España a través del árabe marroquí bajo el significado indio “opiáceo” o “indio”. A su vez, en el árabe clásico significaba “alegría” o “humor”. Aquí, la palabra ha sufrido algunas modificaciones, conociéndose sobre todo por la expresión Kief, aunque también se utiliza Kifi, Quif o Kaif.

El color del Kifi es entre amarillento y marronáceo, según la calidad del concentrado de cannabis y el grado de oxidación. Su apariencia es similar al polvo pero algo grueso y es la base para crear ladrillos de hachís, para los cuales se le aplica calor y presión.

¿Cómo hacer Kifi?

La extracción del Kifi es un proceso relativamente sencillo que se puede realizar en casa con algunas herramientas básicas. Además, actualmente existen varios instrumentos para facilitar esta tarea.

Herramientas e ingredientes

• • Cogollos con grandes cantidades de resina
• • Tamiz
• • Bandeja antiadherente

Prepara Kif paso por paso

1. Escoger los cogollos. Las mejores flores para hacer Kifi son las más resinosas y de alta calidad. Éstas aseguran la potencia y el sabor del resultado final.
2. Congelar las flores. Es recomendable introducirlas en el congelador durante varias horas, en una bolsa de plástico, sobre todo en aquellos no equipados con la tecnología no-frost. Los cristales de hielo agujerean el material vegetal rompiendo los tricomas y avanzando su oxidación. Por otro lado, el frío ayuda a que estos tricomas se separen del resto de la planta fácilmente.
3. Cribar los cogollos. Una vez estén congelados, puede comenzar la extracción. En este caso se colocan las flores en una malla o tamiz de malla fina. Ésta se agita suavemente para que los tricomas se desprenden de la materia vegetal y caiga a través de la malla a la bandeja antiadherente, que debe estar colocada debajo.
4. Recolectar el Kifi. Con la herramienta indicada para este tipo de extracciones ( una tarjeta o espátula puede servir) se recolecta todo el Kief que haya caído y se transfiere a un contenedor.
5. Aumentar la calidad. Si han quedado muchos restos vegetales junto a los tricomas, pueden eliminarse empleando un tamiz con una malla más fina.
6. Almacenar Kifi. Para que se conserve durante mucho tiempo, es menester guardarlo en un recipiente hermético de cristal, en el que preservará su frescura y potencia. Después puede usarse sólo o mezclado como otra hierba.

¿Cómo usar el Kifi?

Como otros concentrados del mundo cannábico, el Kifi tiene múltiples usos.

Kifi para fumar

Aunque es posible fumar el Kifi sólo o mezclándolo con otras hierbas, en muchos países, entre los que se incluye España, está totalmente prohibido por provenir de la planta de cannabis. Por su alta concentración de cannabinoides puede producir efectos potentes y rápidos.

Suele añadirse a una pipa o bong, o colocarlo en un papel de liar.

Vaporizar

Otra posibilidad que da el Kifi es vaporizarlo mediante dispositivos destinados a este fin, como los cigarrillos eléctricos con compartimentos para extractos. La vaporización permite disfrutar de los compuestos activos y del perfil organoléptico prácticamente al completo gracias a la posibilidad de combustionar a baja temperatura.

Se considera una opción más saludable por el descenso de químicos que entran en el organismo en comparación con otros métodos, como los descritos en el apartado anterior.

Preparar comestibles

Al igual que las flores de marihuana, el Kief puede emplearse en recetas cannábicas como brownies, galletas y otros comestibles horneados. Concretamente puede agregarse a la masa o espolvorear sobre el resultado final para añadir un toque de potencia y sabor.

Concentrados

El Kifi también puede utilizarse como materia prima para la elaboración de otras extracciones de cannabis, como el Rosin de hachís o el aceite de cannabis. De hecho, suelen ser productos más potentes que los que se fabrican a partir de concentrados preparados con flores. Son una buena opción para los usuarios terapéuticos de la marihuana cuando es rico en CBD, ya que con una dosis menor consiguen el mismo efecto y pueden utilizarse sin necesidad de fumar.

Efectos del Kifi

El Kifi es uno de los concentrados más potentes por reunir en grandes cantidades los componentes activos de la planta de cannabis. El efecto que tendrá en el organismo dependerá de la variedad que se haya utilizado para la extracción.

Predominarán los medicinales cuando el concentrado provenga de genéticas ricas en CBD. En cambio, cuando derive de una genética con altos niveles de THC, será psicoactiva. En el caso de tratarse de una variedad sativa, irán acompañados de euforia y estimulación cerebral. En cambio, un índica proporcionaría somnolencia y mucha hambre.

Por lo tanto, el Kifi es un concentrado extraído con tamices y de gran potencia. Puede ser muy útil para las personas que usan el cannabis con fines terapéuticos pero no están acostumbrados a fumar. Sin embargo, también puede producir fuertes efectos psicotrópicos cuando se emplean variedades de alto contenido en THC en su elaboración.

Mr. Hide Extracts no recomienda el uso del Kifi por ser un derivado de la planta cannabis. La información proporcionada en este artículo tiene un fin únicamente divulgativo, por lo que no nos hacemos cargo de un mal uso de la misma.